sábado, 17 de mayo de 2014

El dormitorio del artista en Arlés



Pintura postimpresionista, realizada en óleo por Vincent van Gogh. Se trata del dormitorio del artista de su periodo en Arlés. Aparecen una serie de objetos cotidianos que están emparejados (dos sillas, dos puertas, cuadros emparejados de dos en dos, dos almohadas) Realizado con pinceladas gruesas y pastosas, utiliza colores cálidos y complementarios (el amarillo y el azul) Las figuras aparecen delineadas por líneas negras que se aprecian más en unas zonas que en otras, por ejemplo en la cama, en la silla más cercana al espectador o en la parte derecha del suelo, estas líneas marcadas tienen que ver con la influencia que Van Gogh recibió de los grabados japoneses, muy difundidos por el este de Europa, influencia de estos grabados es también la ausencia de sombras, el uso de colores planos, las pronunciadas perspectivas y, en general, la sencillez del dibujo, que se aleja de plasmar la realidad tal y como nuestros ojos la perciben, debido a que con la invención de la cámara fotográfica este objetivo ya está conseguido y ahora el arte pretende buscar nuevos objetivos.

viernes, 9 de mayo de 2014

La Pedrera


Realizada por Gaudí, en el siglo XX. De tendencia modernista que forma parte de la herencia cultural de la arquitectura barroca de Italia, debido al movimiento de la fachada con líneas curvas y un paramento que avanza y retrocede continuamente, recordando a Bernini o Borromini. Cada balconada tiene una individualidad y ningún elemento se repite, dando carácter orgánico, de ondulado suave. Nos recuerda a las cuevas de Capadocia ya que vemos los materiales al natural, trabajados para ser habitados por el ser humano. Construida con nuevos materiales que nos recuerdan a la roca calcárea de Turquía. La complicidad de la planta nos recuerda a une ameba, o una célula que también se puede apreciar si se observa el patio desde arriba, recordando a la plasticidad de un ojo. La parte superior tiene una terraza con varias ventanas sobre las que hay tejadillos que salen directamente del tejado, también este tejado nos recuerda a un dregón con sus formas ondulantes, propias de los reptiles. Además incluye unos respiraderos a modo de guerreros tuaregs con distintos juegos, unos más decorados y otros menos, con elementos vegetales o con trencadís.

Sullivan, edificio de Chicago


Construcción realizada en Chicago que utiliza los nuevos materiales (hormigón armado). Sullivan es un constructor que une el clasicismo con las nuevas tendencias racionalistas (líneas simples, bloques cúbicos) lo que será el racionalismo, pero perviven aspectos de la época clasicista, como el arco de medio punto (en la base inferior tres arcos que recuerdan a los arcos de triunfo romanos y a las portadas góticas, además van disminuyendo en tamaño según se asciende, lo que nos recuerda a la sección áurea o a la superposición de órdenes) y las pilastras adosadas.Tiene la idea de bloque, por lo que es de carácter geométrico al ser su base el cuadrado. La cornisa superior conecta con los palacios florentinos del Renacimiento, así como en el juego de ventanas bíforas, coronadas con su arco de medio punto (el empleo de las vidrieras dan gran luminosidad al edificio). También nos lo recordaría el almohadillado de la parte superior del edificio, que marca una textura distinta en la fachada del edificio. Gracias a la construcción del ascensor aparece un mayor número de plantas, una nueva tipología de edificio (los rascacielos), ya que antes solo eran de 5 plantas como mucho. Ahora el muro pierde el carácter sustentante y actúa como cierre, ya que toda la estructura del edificio tiene unos empujes interiores que lo sostienen.

sábado, 3 de mayo de 2014

La familia de Carlos IV


Pintura al óleo, realizada por Francisco de Goya en el año 1800, durante la etapa artística del Neoclasicismo español. Se trata de un retrato de grupo en el que aparece la familia de Carlos IV, representada en tres grupos ligeramente diferenciados, en el centro los monarcas con sus hijos (Carlos ligeramente adelantado) y a ambos lados, más separados el príncipe heredero y los príncipes de Parma. La composición está marcada por una horizontalidad que dan los personajes colocados en fila que se rompe con dos líneas verticales de los marcos de los cuadros del fondo de la habitación. Goya se interesó bastante por captar la individualidad de cada personaje, intentando mostrar sus personalidades en los distintos gestos de la cara. También cuida los detalles de los ropajes (adornos dorados o las bandas) todos ellos realizados con una pincelada suelta. Los tonos empleados son más bien cálidos y parece que hay una especie de bruma dorada en el ambiente, lo que nos recuerda a las Meninas de Velázquez. Además la luz juega un papel importante: se percibe un rayo de luz que entra desde la esquina superior izquierda según se mira el cuadro de frente y esto hace que percibamos distintos volúmenes en los ropajes según estén iluminados o no. También mencionar el juego espacial que ocasiona el autorretrato de Goya al situarse detrás de los protagonistas, en penumbra, para no llamar tanto la atención. Al incluirse a sí mismo mirándonos intenta involucrar al espectador, como si el pintor estuviera reflejado en un espejo y en realidad estuviera a nuestro lado.

sábado, 26 de abril de 2014

Los Desastres de la Guerra



Aguafuerte realizado por Francisco de Goya en el siglo XIX, durante la etapa artística del Neoclasicismo español. Esta técnica consiste en cubrir una placa metálica con barniz o cera, sobre la que se hace el dibujo y al echar el aguafuerte, el contorno queda marcado en la placa y a continuación se pueden hacer distintas impresiones. Pretende dar a conocer los desastres causados por la Guerra de la Independencia Española en una serie de 83 grabados. Aparecen cadáveres mutilados y colgados de un árbol. Un cuerpo está atado de pie mientras que otros dos se encuentran bocabajo y a uno le falta la cabeza y el brazo, que están atados a su lado. Aparece en medio de un monte, en el que las colinas que se ven al fondo dan profundidad a la imagen. Presenta un gran realismo tanto en los cuerpos como en el propio árbol lleno de ramas definidas. Se trata de un composición abierta, muy teatral, donde el drama es inevitable. Además se aprecia un gran avance de Goya para su época: el carácter testimonial, incluso periodístico, contándonos su versión de los acontecimientos. En esta composición en especial, no se distingue si los cuerpos son españoles o franceses, de esta forma es una denuncia de la injusticia en general, del hombre contra el hombre. Esta composición nos recuerda a Ribera, con sus diagonales abiertas y paralelas, la tensión y escorzos de los cuerpos (el hombre que está colgado por los pies) etc.


miércoles, 9 de abril de 2014

La rendición de Breda o Las lanzas


Obra del periodo Barroco español, pintada sobre óleo por Diego Velázquez entre 1634 y 1635 (su segunda etapa, entre los dos viajes que realiza a Italia). Representa un tema histórico: la victoria de España sobre Breda durante el reinado de Felipe IV. El cuadro está dividido en dos espacialmente, en la parte superior, un rectángulo para el paisaje, y en la parte inferior otro rectángulo para los personajes. En el rectángulo inferior, en nuestra derecha aparece el ejército español y en la izquierda, el ejército de Breda. Además el cuadro está dotado de cierta simetría marcada por los dos personajes centrales y a la vez los caballos de los generales sirven para cerrar de forma elíptica el conjunto de los personajes. Para dar profundidad, usa personajes de espaldas y el propio caballo del ejército español, de gran volumen y proporciones . Los rostros son variados y muy expresivos y podría haber incluso un autorretrato de Velázquez y un personaje en el lado izquierdo, que junto con Velázquez crean una complicidad con el espectador, introduciéndonos en el cuadro. Y sin duda alguna, el elemento más llamativo, las picas de gran verticalidad, que fueron confundidas por lanzas, de ahí el nombre del cuadro (crean una sensación de equilibrio de planos, rompiendo la línea horizontal del horizonte, dándole equilibrio). Y en el rectángulo inferior aparece el paiasje, se trata de una vista en perspectiva de Breda, en el que se aprecia la perspectiva aérea(comienza con colores cálidos que en el fondo del paisaje se enfrían) con algunos detalles como las nubes o el humo de la batalla. En todo momento busca el realismo (ropajes, gestos o los detalles de las lanzas) Además la composición general está marcada por dos diagonales creadas por ambos bandos. En cuanto a la temática general, representa el respeto y la complicidad entre ambos bandos que se dan las llaves en el centro del cuadro.

Dos niños comiendo melón y uvas



Pintura realizada al óleo por Esteban Murillo, entre 1645 y 1650, forma parte del período barroco español. Se trata de una pintura de tema costumbrista, en el que aparecen dos niños (mendigos) comiendo melón y uvas, Murillo siempre tuvo predilección por mendigos o niños de la calle para plasmar las escenas cotidianas, pero se trata de un costumbrismo amable, no es un costumbrismo serio que pretenda impresionar. A la hora de hablar de este tema debemos tener en cuenta que fue pintado en Sevilla, y comprado en ese mismo lugar, debido a la gran clientela que estaba haciendo negocios por Sevilla, de paso, debido a la riqueza que producía la casa de Contratación, y como eran anglicanos o protestantes, preferían estas temáticas cotidianas antes que las religiosas. En este cuadro se ve tenebrismo (estamos en una de las primeras etapas de Murillo, por lo que todavía está influenciado por Caravaggio) y un contraste de la luz, que recae sobre los niños dejando el resto oscurecido, y además el dominio del bodegón en el melón, las uvas, la cesta o la navaja. Un gran naturalismo en las telas y en los ropajes, expresando de una forma muy real sus texturas, así como la cara de los niños (que se miran entre ellos directamente, mostrando complicidad y creando una diagonal con la mirada) o la suciedad de los pies descalzos.

San Hugo en el refectorio de los cartujos


Pintura realizada en óleo por Francisco de Zurbarán, fue pintada entre 1630 y 1635 por lo que forma parte del Periodo Barroco Español. Se trata de un cuadro de temática religiosa. Aparece en un primer plano san hugo, detrás, sentados en una mesa con forma de L los cartujos, con distintas expresiones que le dotan de realismo e individualidad. En un siguiente plano la pared, que tiene un cuadro. Este es un hecho llamativo, la representación de "un cuadro dentro de un cuadro", en el que la temática es religiosa y destacan los colores cálidos y en un último jalón visual el paisaje del exterior de la construcción, al que le falta realismo, aquí vemos detallada la poca técnica que Zurbarán tenía para la perspectiva, de hecho en la mayoría de los cuadros evita las perspectivas marcadas. A nivel general destaca la gran variedad de tonalidades blancas y grisáceas, y el ambiente de reflexión, de tranquilidad que emiten los monjes, parece que ellos mismos son quienes desprenden la luz (esto se debe a que es una composición con carácter geométrico, en el que predominan los rectángulos y los triángulos) Además el carácter realista del cuadro (la sombra del personaje central) y también cabe mencionar el cuidado bodegón que pinta sobre la mesa con gran detallismo del pan, los platos o las jarras, mostrándonos su cuidado interés por las naturalezas muertas y su experiencia a la hora de llevarlas al lienzo.

El martirio de San Bartolomé


Cuadro pintado al óleo por José de Ribera. Pintado en 1644, por lo que forma parte del arte Barroco español. Se trata de una de las obras maestras de Ribera, destaca en gran realismo en los distintos personajes, al tener un estudio minucioso de los gestos (todos ellos muy expresivos) y de los escorzos (las piernas del que hace fuerza para levantarlo o la espala del personaje que va vestido de rojo) La obra transmite el dolor (propio de la época barroca) Juega con las diagonales, creando dos triángulos invertidos con los brazos del mártir y el eje longitudinal del palo central, que nos lleva a poner la atención sobre Bartolomé. Las figuras de los laterales, ya en un segundo plano crean líneas en zigzag para dar dinamismo al cuadro y a su vez dan profundidad. Para esta profundidad se sirve de algunas figuras de espaldas. Además se establecen elementos que comunican al espectador con el interior del cuadro, al crear como un gancho visual, es decir, la mujer que sostiene al niño al mirar directamente al espectador. La composición está pintada con colores cálidos y se crea un contraste entre el fondo azul  y las figuras (que juegan con sombras y claroscuros de los ropajes) Los colores son característicos de la pintura veneciana (azules del cielo, colores claros y gran luminosidad, que crean una atmósfera envolvente) de forma general, el color predomina sobre la línea. Además, un carácter teatral, que capta el momento justo del drama, de máxima tensión que predominará en el Barroco italiano, y en España con menos repercusión. Este cuadro es en el momento en que deja de influenciarse de Caravaggio y su tenebrismo, aunque permanecen luces y sombras.

lunes, 7 de abril de 2014

Clasificación de imágenes de arquitectura barroca


BASÍLICA DE SAN ANDRÉS DEL QUIRINAL. Iglesia situada en la colina del Quirinal (de ahí su nombre) Fue construida a mediados del siglo XVII por Gian Lorenzo Bernini. Forma parte del estilo barroco italiano.




PLAZA MAYOR DE MADRID. Construida por Juan de Herrera, y modificada por Dieglo Sillero, aunque el modelo más antiguo fue terminado por Juan Gómez de mora, en 1619. Arte barroco español.





FACHADA CATEDRAL DE MURCIA. Obra barroca, a modo de retablo de piedra, proyectada por Jaime Bort en 1737 y 1754.





BALDAQUINO DE SAN PEDRO. Basílica de S.Pedro del Vaticano. Realizado por Gian Lorenzo Bernini entre 1624 y 1633.




FACHADA PALACIO REAL DE MADRID. Filippo Juvara y J.B. Sachetti. 1736-1764.




PLAZA MAYOR DE SALAMANCA. Su construcción fue desde 1729 hasta 1755. Proyecto trazado por Alberto de Churriguera, con la colaboración de Nicolás Churriguera, José de Lara Churriguera y Joaquín García de Quiñones.




FACHADA DEL PALACIO DEL MARQUÉS DE DOS AGUAS. Portada realizada en alabastro, de Ignacio Vergara. 1740-44. Churriguero puro.




FACHADA PALACIO DE SAN TELMO, Sevilla. Portada de Leonardo de Figueroa, 1724-1734.




FACHADA DE LA IGLESIA DEL GESÙ, Roma. Realizada por Giacomo della Porta. Estilo Barroco italiano.





domingo, 30 de marzo de 2014

La ronda de noche


Pintura realizada al óleo, por Rembrandt entre 1640 y 1642, se clasifica dentro de la pintura del arte Barroco, en especial en la pintura holandesa. Se trata de un retrato de grupo, o doelen, en el que aparecen distintos personajes dispersos, llenando el espacio del cuadro, que aportan realismo porque cada uno tiene un gesto, una mirada distinta e incluso dialogan entre ellos. Dota a la escena de una iluminación "tenebrista", de hecho se pensaba que la escena sucedía de noche, de ahí el  nombre del cuadro, aunque más tarde al realizar una restauración y retirar el barniz, se descubrió que se trataba del interior de un portalón, de día, que estaba en penumbra. Un papel importante, por lo tanto, el de la luz, que se trata de un potente rayo de luz que ilumina el centro del cuadro. Además se establece una jerarquía a la hora de representar a los personajes, para esto son importantes los tres ejes: uno horizontal, donde se sitúan las figuras que rodean a los personajes principales, otro vertical, que separa a los dos personajes centrales y por último, las diagonales que crean las lanzas y las banderas. También cabe destacar la minuciosidad y el detallismo que se percibe en lugares como los ropajes, o la sombra de la mano del capitán sobre su compañero. Y por último, mencionar el juego de colores, en su mayoría cálidos, entre los que destacan la niña y el personaje vestido de rojo a su lado, al contrastar tanto en color y en luz con el resto de las figuras.

Clasificación de imágenes






miércoles, 26 de marzo de 2014

Conjunto de El Vaticano



Basílica de San Pedro


Realizada por el arquitecto Bramante, tras la petición del Papa Julio II. Se quiso crear un edificio digno para la capital de la cristiandad, en el lugar en que se encontraba la primitiva basílica paleocristiana que fue derribada. Bramante crea un edificio con planta de cruz griega, con una cúpula central destacando sobre las otras cuatro menores que se situarán en los ángulos de los brazos. Tras la muerte de Bramante, tanto Rafael como Antonio de Sangallo el Joven reciben el encargo de continuarla, pero ninguno de los dos hace avances significativos, simplemente modifican el trazado central de cruz latina. Posteriormente Miguel Ángel continúa la obra (encargo del Papa Paulo III). Será quien retome el plan central con planta de cruz griega, pero más simple, con una única entrada principal. En el centro de la iglesia, sobre cuatro enormes pilares levanta una enorme cúpula inspirada en la de Santa María in Fiore de Florencia.




La cúpula en el exterior se eleva sobre un enorme tambor circular que presenta columnas pareadas de orden corintio y que sobresalen del muro, aportando un gran volumen. Entre ellas se sitúan ventanales rectangulares con un entablamento curvo. Encima se coloca un friso con una decoración de guirnaldas, cada una correspondiendo a un vano. A partir de este segundo cuerpo se levanta la cúpula, que tiene los nervios destacados, generando un gran juego de luz y sombra. Sobre la cúpula, como remate, una linterna sustentada también por columnas pareadas. El objetivo es llenar de luz el espacio del crucero, creando así una sensación espacial diáfana, además de dotar al edificio de un gran sentido monumental. Esta cúpula sirvió de modelo a las grandes construcciones posteriores.

Además el Papa Paulo V le encargó la transformación de la iglesia de San Pedro. Realiza así la definitiva planta de San Pedro del Vaticano. Maderno prolonga la primitiva planta de cruz griega que diseñará Bramante por los pies, transformándola en una planta de cruz latina. También es obra suya la Fachada de San Pedro del Vaticano.

Fachada de San Pedro del Vaticano




La fachada, de estilo Barroco, fue realizada por Maderno. Presenta una escalinata de acceso al templo. La fachada se divide en dos cuerpos. En el inferior, ocho columnas de orden gigante y cuatro pilares adosados a los laterales. En los laterales hay dos aberturas con arcos de medio punto, según se va hacia el centro nos encontramos con hornacinas con arco de medio punto que presentan frontones circulares, a continuación hay cinco puertas, dos de ellas adinteladas, otras dos con arco de medio punto y una central adintelada. En el mismo cuerpo, encima, encontramos vanos rectangulares, algunos de ellos ciegos, y sobre ellos, ventanas con arcos de medio punto con balconada, encima de ellos frontones triangulares y semicirculares sostenidos por columnas. Una línea de entablamento con inscripciones separa los dos cuerpos. En el cuerpo superior hay pilastras adosadas y en el intercolumnio encontramos vanos cuadrangulares y rectangulares alternados, los rectangulares en la parte superior con frontones triangulares y en el central un amplio frontón triangula con escudo en el medio. Hay un campanario a cada lateral. Remantando todo el conjunto una balaustrada junto con estatuas en línea con las pilastras. Además, en los laterales, hay dos relojes. 


Plaza de San Pedro del Vaticano






Tiene forma elíptica, formada por una gran columnata. Las columnas nacen en la fachada de la basílica como dos grandes brazos que acogen a la Humanidad. Bernini toma como punto de partida un eje central. Traza dos brazos rectos desde los extremos de la fachada convergiendo hacia el eje, produciendo así un engaño óptico que da mayor dimensión a la fachada principal. Estos dos brazos rectos están constituidos por una columnata dórica que se remata con un entablamento coronado por estatuas. Esta columnata se curva describiendo una elipse y sitúa dos fuentes en sus extremos. La columnata curva consta de cuatro hileras de columnas de cuatro órdenes distintos. En el centro de la plaza hay un gran obelisco egipcio. Bernini se preocupa especialmente por los juegos de perspectiva y por intensificar el efecto de profundidad. En la plaza procura que el templo nos produzca la impresión de encontrarse lo más al fondo posible. La importancia de este recinto pedía ser tratada de manera diferente al resto, era necesario aislarla de alguna manera para que el peregrino la contemplara en toda su grandiosidad, además el dibujo que aparece en el suelo de la plaza recuerda a un crismón.





sábado, 22 de marzo de 2014

Éxtasis de Sta. Teresa de Jesús



Escultura del éxtasis de Sta. Teresa de Jesús, situada en la iglesia de Sta. María de la victoria, en Roma. Fue realizada por Gian Lorenzo Bernini y forma parte del conjunto de la capilla Cornaro, construida en el s.XVII forma parte del periodo barroco italiano. Representa un tema religioso, los dos personajes principales son Sta. Teresa de Jesús junto a un ángel. Son figuras de bulto redondo, con una gran variedad de puntos de vista. Se aprecian distintas técnicas de tallar el mármol: en los cuerpos y en los rostros, un cuidado acabado, completamente pulido que da la sensación de suavidad y en los ropajes tanto de la virgen como del ángel, una gran cantidad de pliegues que juega con la luz, creando claroscuros y ayudando a formar distintos volúmenes, y en la parte inferior del conjunto se aprecia la técnica del non-finito, que nos recuerda a Miguel Ángel y da la sensación de que no está terminado, aparece la piedra en su estado bruto. Sobre el conjunto una serie de rayos dorados, que iluminan a los personajes principales y a la vez llaman la atención del espectador para que dirijan la mirada hacia ellos junto con el ángel que está dirigiéndose hacia la virgen, la figura de la virgen es una composición en zigzag, presenta ese dinamismo del barroco y finalmente mencionar las caras, esa gran expresividad que muestran el momento justo, el de más tensión, queriendo revelar lo que sienten los personajes en su interior.

lunes, 17 de marzo de 2014

Basílica San Andrés del Quirinal


Iglesia situada en la colina del Quirinal (de ahí su nombre). Fue construida a mediados del siglo XVII por Gian Lorenzo Bernini. Forma parte estilo barroco de Italia. Una fachada en la que se nota la influencia clásica. Comienza con una escalinata (símbolo de la ascensión hacia la divinidad, asociándola con las montañas y la altura), con sus peldaños rematados en forma convexa, y sobre ellos un pórtico de entrada sostenida por columnas de orden gigante que sostienen una bóveda de horno, con una rica decoración en su interior. La puerta principal sigue la estructura de friso corrido, con un tímpano también sin decoración y a continuación un entablamento de forma convexa, que da movimiento a la fachada, decorado con una balaustrada y un escudo central. En ambos lados dos pilastras adosadas de orden gigante y capitel compuesto, que sostienen un friso corrido, con una cornisa decorada y un tímpano sin decoración, que avanza y retrocede en el muro, adaptándose a los distintos elementos, como pueden ser las pilastras. Y en el exterior el gran tambor que cubre la bóveda y un entablamento que avanza y retrocede, además son evidentes los materiales combinando mármol y ladrillo. En cuanto a la planta, destacar su forma ovalada característica del período Barroco, en el que se prefieren las plantas centralizadas, y una serie de capillas alrededor del espacio central que alternan las formas rectangulares y circulares y dos brazos cóncavos que sirven para central la visual del espectador hacia el pórtico central, una finalidad envolver al espectador. Son clara influencia de Bernini (columnata de la plaza de S.Pedro del Vaticano)

San Carlos de las cuatro fuentes

 Iglesia de San Carlos de las cuatro fuentes, Roma, realizada por Francesco Borromini. Es un tipo de arquitectura religiosa del arte italiano en el período del Barroco, s.XVII. Una fachada en la que destacan dos niveles. En el nivel inferior, sobre una escalinata de peldaños rematados de forma convexa, la puerta central, enmarcada por dos columnas, una a cada lado, que sujetan un dintel sobre el que se representa una escultura dentro de un nicho. A ambos lados, dos columnas de orden gigante que rompen con el entablamento (muy características del barroco), dotando de gran simetría a la fachada, ya que la decoración de este primer nivel es completamente igual en los dos lados (tanto los tondos como las dos  figuras laterales). A continuación un gran entablamento que adquiere movimiento al ser dotado de formas ondeantes, que termina en una balaustrada y se encuentra grabado con unas letras (influencia romana). Y a continuación un segundo nivel que sigue la misma estructura que el anterior (puerta central y a ambos lados columnas de orden gigante) Tiene una rica decoración y destacando, un espejo central ovalado, sujetado por dos querubines y rematado con un frontón y con volutas. Una clara novedad, la presentación de los capiteles esquinados y todas las formas cóncavas excepto el pabellón convexo.La fachada en general denota movimiento al jugar con las formas cóncavas y convexas y rompe con el equilibrio característico del Renacimiento, además supone un conjunto tanto de escultura como de arquitectura. En cuanto a la planta, resaltar el gusto barroco por las plantas centralizadas, para ello usan las formas ovaladas. Pero en este caso Borromini ha situado un rectángulo central, en el que se inserta un gran óvalo con los lados cóncavos, que a si mismo en su configuración interna presenta una plasticidad de los elementos que hace que interactúen y en todo el lateral nichos entre columnas.

viernes, 14 de marzo de 2014

Capilla funeraria de los Médicis



Se trata de la tumba funeraria de los Médicis, situada en la capilla de San Lorenzo. Una composición realizada por Miguel Ángel durante el Renacimiento italiano, exactamente durante el Cinqueccento. Representa la muerte a través del neoplatonismo. Ya forma parte de un manierismo italiano, en el que las figuras representan movimiento y tensión con abundantes escorzos. Sobre la tumba, dos volutas alargadas y curvas que sostienen dos figuras: se trata de una metáfora del día y de la noche, la de la izquierda (el día) una anatomía jóven, en cuerpo de mujer y la de la derecha un cuerpo de hombre. Rompen el equilibrio característico del Renacimiento, dando la sensación de que se van a escurrir hacia abajo. y una tercera figura, en el muro que representa al fallecido observando su propia tumba. En el muro distintos nichos decorados con modillones que no sustentan nada, lo que hacen es desequilibrar el muro, intentando sorprender y dar una sensación de angustia y recargada, dando ese toque característico del manierismo escultórico de Miguel Ángel.


Dánae recibiendo la lluvia de oro



Lienzo pintado por Tiziano durante el Renacimiento italiano, exactamente en el Quinqueccento. El tema es una dánae recibiendo la lluvia de oro, mitología, muy representada durante el Renacimiento. Refleja el estudio de la anatomía (corrientes del humanismo y del antropocentrismo) mostrando formas suaves y blandas, a través de trazos ligeros. El volumen se adquiere con la luz, creando contraluces y sombras. Las figuras adquieren expresividad y se sitúan en distintos planos, la perspectiva se consigue  usando telas o cortinas, como elementos de encuadre.

David (Miguel Ángel)



Escultura realizada por Miguel Angel en mármol blanco durante el Renacimiento italiano, exactamente en el Cinqueccento. El tema es el David bíblico que casi siempre se usaba como excusa para representar desnudos en esta época. Demuestra la gran influencia del humanismo y del antropocentrismo que trajo consigo el Renacimiento y la curiosidad por la anatomía humana, de la que se comenzaban a tener estudios más avanzados. Se trata de una escultura de bulto redondo, en contraposto y además presenta la curva praxiteliana, combinando las líneas de fuerza en zigzag. Los acabados son cuidados y muy pulidos, gran minuciosidad y detalle (venas o músculos) y en general esbeltez y canon seguido en esta época. Pero presenta una novedad característica de Miguel Ángel: la "terribilitá". El gesto esta en tensión, expresa claramente los sentimientos de la figura, lo que le hace parecer real, además el gesto que adquiere el cuerpo es en tensión, el momento justamente anterior al movimiento, como que se está conteniendo.

La Gioconda o Monalisa



Pintura realizad por Leonardo da Vinci durante el Renacimiento italiano, exactamente en el Cinqueccento. En un primer plano la Gioconda con las manos cruzadas, justo delante de una ventana y en el fondo el paisaje. Cabe destacar el dominio de da Vinci en la expresión de la cara, una sonrisa enigmática, no se sabe ni quién era la mujer y tampoco si estaba seria o sonreía. Pero sin duda alguna el elemento característico de esta pintura es la técnica del "esfumato" creada por Leonardo, difuminando los contornos, haciendo que los elementos del paisaje se mezclen, dando una sensación de niebla y un halo de misterio, además incluye la perspectiva aérea, oscureciendo los colores a medida que se alejan. Otro rasgo distintivo de esta época es el volumen, que ya se consigue de forma más natural al jugar con la luz, creando claroscuros y contrastes.

S.Pietro in Montorio



Se encuentra en roma, fue creado por Bramante. Es un templo característico del Renacimiento, concretamente del Quincueccento italiano. De base circular (recordando a los tholos griegos) y construido en mármol. Se sitúa sobre una escalinata (representa a la divinidad, buscando siempre la ascensionalidad), con columnas y capiteles de orden toscano. A continuación un friso en el que se alternan triglifos y metopas y coronado con una balaustrada. Finalmente el tambor de la cúpula, de gran anchura, decorado con nichos y hornacinas y sustentado por finas columnas pareadas y adosadas y sobre una doble cornisa muy marcada se sostiene la cúpula de media naranja, con los gallones marcados, que terminará en una linterna coronada con una bola también en mármol.

sábado, 1 de marzo de 2014

La primavera. Botticelli.



La primavera es una de las obras maestras del pintor renacentista Sandro Boticelli. Forma parte del Quattrocento italiano y está realizada al temple al huevo sobre tabla. El tema es mitológico (influencia humanista) y utiliza la línea suave y elegante (manierismo constante). Riqueza de gestos y expresiones y un gran detallismo y minuciosidad. Emplea la técnica de las veladuras para dar una sensación de transparencia en el ropaje de las ninfas y recrea la figura de "las tres gracias", que será utiliada posteriormente en un gran número de obras.

La Trinidad. Masaccio.



Fresco realizado por el pintor renacentista italiano Masaccio. Está pintado en uno de los muros laterales de la iglesia de Santa María la Novella de Florencia y forma parte del Quattrocento italiano. Se trata de un "trampantojo", engaño visual que intenta imitar la arquitectura (capilla romana con arco, entablamento, pilastras adosadas, tondos y bóveda de medio punto con casetones), siendo en realidad una pintura. Esencial la perspectiva y la simetría en torno a un punto de fuga central para dar profundidad, recreando distintos jalones visuales. En el plano más cercano, los donantes, arrodillados, a continuación, el Calvario (San Juan, María y Jesucristo). Las figuras son sólidas y corpóreas moduladas, entre ellas forman un doble triángulo (perfección y equilibrio en sus tres lados), cuyo centro es Cristo. Además juega con los colores rojo y azul, usándolos en zigzag.




La anunciación. Fra Angélico


Pintura realizada en oro y temple sobre tabla por Fra Angélico hacia 1426 (Quattrociento italiano). Desarrolla el tema de la anunciación tal como aparece narrado en el Antiguo Testamento. Presenta dos espacios distintos, en la izquierda, la expulsión de Adán y Eva del paraíso, ya vestidos porque ya sienten vergüenza, tras tomar la manzana, con un angelito en la zona superior. Existe todo tipo de detalles y minuciosidades en cuanto a la abundante vegetación además de las formas elegantes, suaves y con cierto manierismo (influenciado por el gótico internacional) y en la zona derecha el ángel y María bajo un pórtico de mármol, con arcos de medio punto. También presenta ciertos arcaísmos como los colores del ropaje de la Virgen (túnica roja y manto azul) y la aureola (muestra de que son personajes divinos). En todo momento está presente la perspectiva.

Isaac, Esaú y Jacob. Puerta del Baptisterio de Florencia.



Uno de los relieves de las puertas del baptisterio de la catedral de Florencia. Son un total de diez escenas, realizadas por Ghiberti que fueron terminadas en 1423. El propio escultor Miguel Ángel dijo que podrían ser consideradas las puertas del paraíso, y por eso también se le llama así. Esta escena pertenece al quinto cuadro, se ve como a Isaac le nacen esaú y Jacob, cómo envió a Esaú de caza y como la madre instruye a Jacob y le entrega el cabrito y la piel, poniéndosela al cuello. El relieve está realizado sobre bronce, usando la técnica del schacciato (alto, medio y bajo relieve), llegando a crear casi bulto redondo. Se usa la simetría en torno a un punto de fuga central, ayudado por las líneas de las baldosas del suelo que dan profundidad, junto con la utilización de personajes de espaldas, creando distintos jalones visuales, así como las formas arquitectónicas que recrean el interior de una sala, con forma de cubo.

David de Donatello


Escutura realizada por Donatello, hecha en bronce, pertenece al Quattrocento italiano. Aparece David desnudo, sosteniendo en su mano derecha una espada y con su pie izquierdo sobre la gran cabeza de Goliat, lleva un gorro característico florenciano con hojas de amaranto. Se trata de una escultura muy cuidada, con unas formas muy pulimentadas que entran en un gran contraste con la cabeza de goliat, que tiene los contornos más marcados, es más opaca y entra en más detalles. Bebe de la influencia clásica de Praxíteles y Policleto al reflejar la curva praxiteliana que da una sensación de fluidez y movimiento y el contraposto, aprovechado para pisar la cabeza del gigante.




Sta. María la Novella


Fachada de la ilesia de Sta. María la Novella, situada en Florencia. Finalizada en 1470 por Leon Battista Alberti. El diseño servirá de referencia para un gran número de fachadas de iglesias católicas posteriores. Se divide en tres cuerpos distintos. El cuerpo inferior, de esquema rectangular, contiene una serie de arquerías apuntadas, situadas de forma paralela a la puertacentral (bajo la estructura de arco de medio punto y dintel y puerta decorada con casetones. A continuación un entablamento no clásico, decorado por una sucesión de cuadrados dentro de un rectángulo y en la parte superior, en un tercer nivel, el remate cuadrangular, en el frontón. Tanto en el remate como en el frontón, llama la atención un gran tondo. Pero sin duda alguna la gran originalidad de la fachada son las dos volutas que unifican el cuerpo superior con el inferior, que sirven para llevar el peso a los laterales sobre columnas adosadas. En cuanto a la decoración destacan las formas geométricas (el cuadrado y el circulo, considerados perfección y armonía en este periodo renacentista) y en todo momento se cuida la simetría.



martes, 25 de febrero de 2014

El matrimonio Arnolfini


Pintura del siglo XV, realizada por Jan Van Eik, dentro del estilo gótico, especialmente la escuela de los Primitivos Flamencos. Se trata de un matrimonio burgués acomodado de Flandes. El cuadro esconde varios símbolos que no son perceptibles a simple vista: el perrito significa fidelidad, los frutos de la ventana los alimentos compartidos, los pies descalzos la intimidad y la cama la vida conyugal. Expresa un gran realismo en las caras y en los pliegues marcados de la ropa (pliegues duros), la creación de varios jalones visuales, en un primer plano la pareja, más al fondo la cama y finalmente la pared con el espejo en el que se refleja el propio autor y deja ver el resto de la habitación. Gran detallismo en el espejo, la lámpara, el perro etc, propios de la pintura gótica. Además tiene un importante papel la luz, que entra en diagonal desde la esquina superior izquierda hacia la inferior derecha, lo que recrea un juego de sombras. Los colores son llamativos y brillantes, también propios de esta época.




Muerte de San Francisco


Pintura perteneciente a la escuela de los primitivos italianos, estilo italo-gótico del siglo XIV. Su autor es Giotto. Pertenece a una colección de pinturas sobre la vida de San Francisco en la iglesia de Asís.En este caso el tema es la muerte de San Francisco, diferenciando dos espacios, el terrenal (San Francisco y el resto de monjes) y el celestial (la bóveda celeste pintada en azul con los ángeles). Se puede apreciar la novedad que Giotto incorporó en su época: la perspectiva y el espacio tridimensional: las figuras están situadas en torno a San Francisco, pero en distintos jalones visuales, para lograr esto sitúa a los tres primeros de espaldas, esto siempre va a dar sensación de profundidad porque parece que están al mismo nivel que la persona que observa la pintura, en el siguiente ya están de lado, hasta finalmente colocar a los que parece que están de frente, esto se ve ayudado por la forma de colocarlos, elípticamente. Además cada uno tiene un gesto, movimiento o expresión distinto, acercándose más al naturalismo y al realismo propios del estilo gótico.

El Descendimiento


Se trata de El Descendimiento de Rogier Van der Weyden. Una pintura propia del gótico del siglo XV, en especial de la escuela de los primitivos flamencos. Es una pintura realizada en óleo, que muestra un gran dramatismo, propio del pintor, al igual que la falta de paisaje de fondo. Las figuras principales, en el centro son la Virgen María y Jesús, ambos con la misma posición (dispuestos en diagonal) y sus lados figuras rodeándolos y San Juan y María Magdalena en los extremos, encorvados, creando una especie de paréntesis, lo que lleva la visión hacia el centro del cuadro y la cruz es el eje central de la composición. Es una pintura muy detallada en cuanto a los rostros, los pliegues de la ropa, los gestos (dolor y sufrimiento), muy cerca del realismo y creada para ser observada de cerca. Además el modelando adquiere una gran importancia, junto con los juegos de sombras y de luces, juega con los volúmenes de los personajes a través del uso de las veladuras y los colores son cálidos y brillantes.

lunes, 10 de febrero de 2014

Portada del Sarmental


Portada de Sarmental de la catedral de Burgos, es una de las portadas más representativas del Gótico peninsular, y fue realizada hacia 1240. Está formada por jambas y parteluz como elementos sustentantes del dintel, tímpano y arco ojival, todos estos elementos decorados con figuras en relieve. A ambos lados de las puertas, en las jambas, sobre un zócalo una serie de arquerías ciegas sobre columnillas adosadas que forman arcos de medio punto entre sí, en un segundo nivel las mismas arquerías, pero a diferencia de las otras porque tiene reyes y en el centro de la portada, un parteluz con una figura en relieve, que podria ser una virgen sobre éste, el dintel y dentro del tímpano, en la parte inferior, el apostolado cubierto por un gran doselete y sobre ellos un pantocrátor rodeado de los tetramorfos, los pliegues tienen volumen y movimiento,  cada uno una postura y un ritmo, no como los pliegues tradicionales del románico, lo que permite acercarse al naturalismo, pero se mantienen aspectos arcaizantes como la ley de la jerarquía. En esta etapa comienza el antropocentrismo que sera esencial en el renacimiento pero aún así el tema principal es el poder de Dios.   Las arquivoltas siguen la linea del arco, son propias del estilo gótico,  además incluyen pequeñas figurillas en relieve que podrían ser querubines por las alas, un total de 27.

martes, 4 de febrero de 2014

Catedral de Burgos


La catedral de Burgos comenzó a construirse sobre los resto de un antiguo templo románico, en 1221, encargada por el Arzobispo Mauricio, siguiendo los patrones góticos franceses. Tuvo importantes modificaciones durante los siglos XV y XVI, como las agujas de la fachada principal o el cimborrio del crucero, que forman parte de un estilo gótico más avanzado. Está construida sobre una planta de cruz latina. En su eje principal tiene tres naves y en el crucero una sola nave. En la cabecera, una doble girola con absiodiolos que son una evolución de los deambulatorios de las iglesias de peregrinaje de etapas anteriores.
En cuanto a la fachada exterior se diferencian  cinco niveles principales: en un primer nivel una triple portada, con su puerta central de mayor tamaño, con arcos ojivales y abocinados, en un segundo nivel, un rosetón central y comienza el arranque de las torres, en un tercer nivel tracerías cuatrifoliadas y la continuación de las torres con ventanas lanceoladas, en un cuarto nivel el remate superior del cuerpo de la torre y por último, y en quinto lugar, las agujas de la catedral y crestería.Estos elemento contribuyen a dar una mayor sensación de altura y verticalidad al edificio junto con los contrafuertes presentes en la fachada. En el alzado interior, grandes pilares dividen en tres naves la planta y terminan formando en un primer nivel, al juntarse entre ellos una serie de arquerías ojivales dobladas y se convierten en contrafuertes en las siguientes alturas que son el triforio, formado por arquerías apuntadas y decoradas con tracerías y en una cuarta altura, las vidrieras, sobre las que parte la bóveda de crucería, que es sexpartita y formada con tramos rectangulares. En el  centro el cimborrio de base cuadrada, también de bóveda sexpartita.